Nos Comunicamos

Este es el espacio del blog para que cada quien ofrende sus cositas, sus comentarios, sentimientos, músicas, metáforas y cualquier cosa que desee.


Bueno, está claro que en este curso fue casi imposible coger notas, así que voy a explicar lo que viví. Para mi fue maravilloso este curso, fue una gozada ,al principio no entiendes muy bien de que va la cosa pero cuando entiendes el mensaje del curso parece que te llenas de fuerza por compartir con todos la experiencia .Lo mas bonito de este curso es ver que puedes estar trabajando individualmente mucho tiempo y que esta muy bien ,pero llega un momento ,como puede ser este, en el que te das cuenta ,de que formamos parte de un todo ,y que realmente al final el trabajo que vale es el del conjunto y este curso te enseña esto de una manera muy bonita .Entonces que decir ,creo que es de los trabajos con mas amor que hecho ,de alguna manera toca con una esencia que tenemos tan olvidada que es la del grupo.
un beso
Maria, mayo del 2007


Que fin de semana tan intenso…
Los sonidos, el movimiento, las coreografías, las dinámicas relacionadas con el tiempo, me parece increíble que solo hayan sido dos días...

Lo primero que viene a mi mente del aprendizaje de aquel fin de semana son los momentos de entrega. Los momentos en los que nos volvimos UNO como grupo y UNO como parejas. Los momentos en los qué estuve inmersa en lo que hacíamos y con quién lo hacíamos.
La danza me ayuda a entregarme, de hecho, es de las cosas en las que más me involucro, dejo de pensar y simplemente me muevo y siento.
Uno de los momentos más significativos para mí fue cuando bailamos todas la mujeres al ritmo de las percusiones. Sentí la fuerza y la comunión femenina de todos los tiempos, como si por un instante el presente fuera también el pasado y como si todas las mujeres del mundo estuvieran danzando y comprendiéndose la una a la otra en esta danza.
Lo primero que viene a mi mente del aprendizaje de aquel fin de semana son los momentos de entrega. Los momentos en los que nos volvimos UNO como grupo y UNO como parejas. Los momentos en los qué estuve inmersa en lo que hacíamos y con quién lo hacíamos.
La danza me ayuda a entregarme, de hecho, es de las cosas en las que más me involucro, dejo de pensar y simplemente me muevo y siento.
Uno de los momentos más significativos para mí fue cuando bailamos todas la mujeres al ritmo de las percusiones. Sentí la fuerza y la comunión femenina de todos los tiempos, como si por un instante el presente fuera también el pasado y como si todas las mujeres del mundo estuvieran danzando y comprendiéndose la una a la otra en esta danza.
MARY TAWIL ROFFE


Ritmo. Latido Universal.
Este fin de semana ha sido un auténtico regalo inesperado.
Mi ritmo interior empezó a sintonizar. El cansancio se fue y la tristeza, dejando espacio libre, abriendo los poros. ¡Prepárate corazoncito, te voy a hacer vibrar de lo lindo!
Las propuestas con el elástico me han fascinado, así como el simbolismo que tiene con una célula y por extensión con el propio organismo y con las relaciones interpersonales en cualquier ámbito. Se trata de una enseñanza y de un aprendizaje simple, sabio y universal. De ahí su poder divino.
Hubieron muchísimos ejercicios a cual más enriquecedor. Algunos fueron reveladores en el mismo instante que los viví, otros lo están siendo ahora que me puse a recordarlos. El ritmo con sus variables rápido, lento, controlado, libre, percutivo, melódico, abstracto... fue tocando en diferentes grados y texturas mi inconsciente, rasgando estructuras, patrones condicionados, dando lugar a que pasara algo auténtico, dando lugar a que me emocionara.
Cuando el ritmo me penetra, la vibración ilumina mi manantial. La energía parece inagotable, como un ralentí que mantiene la carga a punto y la va regenerando.
¿Es el ritmo el origen de todo?
MIRIAM LAURA DIAZ TOBAR


Cuando me vi en el círculo se me pasaron todos los males… Me encanta participar ese ritmo compartido, ser una parte más de la molécula… Me encantaron todos los ejercicios. La intensidad del ritmo me llena de vida, me llena de tierra y me sienta estupendamente bien.
… El captar el ritmo del otro e imitarlo. Me llena de vida, cuando estoy en un taller del círculo abierto tengo la profunda sensación de que esto es lo mío. Me quiero dedicar a ello, saberlo introducir en mi vida. Quiero que forme parte de ella, me parece una forma excepcional de transmitir la importancia de la propia conexión interior y su continuidad en mundo.
Raquel Serna


Después del taller lo que queda es su esencia, esencia que cuesta describir pero que intentaré.
Así me queda el círculo, las miradas y el ritmo como unión entre todo. Ahora, mientras pasan los días esa sensación sigue vigente: mientras camino, miro, mientras bailo, miro, voy en el metro y miro. Miro hacia fuera e intento percibir el ritmo entre nosotros, los humanitos. Me gustaría poder sentir el “baile” de la vida a diario. Me llevo todo esto y el estar alerta para no perder un ápice de la belleza que me pueda rodear.
El compartir las canciones. Fueron como un regalo de alma de cada uno de mis compañeros, como un círculo elástico, con ojos abiertos, con dentros y fueras espontáneos, sin exigencias de guión, con ritmo propio. Lo percibí como una despedida de curso tácita. Luego, el regalo del círculo de 7 minutos con miradas vivas y llenas de amor.
Gracias. Les guardo en mi corazón.
Helena


Que viaje!
Cuánta generosidad!
Cuánta belleza toda junta!!!!
Para mi fue increíble, y hubo algo muy fuerte que se despertó en mi, me marcó, me movilizó.
Comprendí su mensaje, y me pareció maravilloso, la unidad, el dejar de ser uno para ser todos, el ritmo armónico de la vida que me acompaña y del que estoy siendo tan consciente últimamente, como si todo fluyera de manera sutil, la vida me fluye de una manera sutil
Maria Jose


No sé muy bien explicar lo que pude sentir, experimentar, vivir en este taller….
Por supuesto todas las palabras parecen demasiado pequeñas para poder resumir la vivencia de estos días.
Una cosa esta segura que ayer al salir del taller me sentía en un estado de plenitud, me sentía enamorada de la vida, enamorada de mis compañeros, enamorada del grupo, enamorada de los profesores, enamorada de mi misma… Me sentí parte de un todo y fue una experiencia mágica, fue una emoción enriquecedora, fue casi transbordante la belleza que pude vivir.
No sé, pero si hasta ahora había podido escuchar hablar de ritmo cósmico, de energía cósmica y etc etc, ahora estoy segura que existe o por lo menos en mi pequeña esencia la pude experimentar.
Anarita

Me ha encantado la sintonía que sentía de y en el grupo. Las miradas entre nosotros, el equilibrio de movimientos, la complicidad mantenida en cada rueda, o en cada espacio de movimientos libres… Es como si toda la vida hubiéramos estado haciendo algo en conjunto. Me ha llenado, esta sensación de estar en el grupo, con todos, con cada uno. Me gustaba encontrar a cada persona en las miradas o los toques o en los pasos. Y sentir que le pertenecía y me pertenecía, como si fuéramos un poco uno del otro desde siempre.
Edite Amorin

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